miércoles, 24 de junio de 2009

Sigue Corriendo

Tal vez hayas escuchado la historia de John Stephen Akhwari, el corredor de maratones de Tanzania que quedó en último lugar en las Olimpíadas de 1968 en México. Ningún corredor que ha terminado en último lugar ha quedado tan atrás.
Se lesionó mientras viajaba y entró al estadio cojeando con la pierna ensangrentada y vendada. Había pasado más de una hora desde que el resto de los corredores terminó la carrera. Sólo quedaban unos cuantos espectadores en las gradas cuando Akhwari terminó de cruzar la meta.
Cuando le preguntaron por qué siguió corriendo a pesar del dolor, Akhwari contestó: «Mi país no me envió a México a iniciar la carrera. Me envió a terminarla.»
La gesta de John Stephen Akhwari, representó, y lo sigue haciendo, lo mejor del deporte y de los valores que transmiten los juegos olímpicos. Aun sufriendo fatiga y dolor, con calambres en las piernas, deshidratado y desorientado, su coraje y determinación le impidieron abandonar, debía seguir, tenía que acabar como fuese, y así lo hizo. Más tarde alguien escribió: ''Hoy día hemos visto a un joven corredor africano que simboliza lo mejor del espíritu humano, una actuación que le da significado a la palabra valentía''. Para algunos la única recompensa es la personal (medallas, fama) para otros, como es el caso de John Stephen Akhwari, el triunfo era saber que terminó lo que se había propuesto.
La actitud de este atleta debe ser la nuestra a medida que envejecemos. Tenemos «una carrera por delante» (Hebreos 12:1), y hemos de seguir corriendo hasta que lleguemos a la meta final.
Nadie es demasiado viejo para servir a Dios. Debemos seguir creciendo, madurando y sirviendo hasta el final de nuestros días. Desperdiciar nuestros últimos años es robar a la Iglesia los dones selectos que Dios nos ha dado para compartir. Hay un servicio que prestar. Todavía hay mucho que hacer.
Así que sigamos corriendo «con paciencia». Terminemos la carrera. . . con firmeza. --David Roper

Hebreos 12:1.
. . . corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante.

martes, 23 de junio de 2009

Florece donde estés

Una joven pareja se mudó a otra ciudad, lejos de la familia y los amigos. Llegó la mudanza, la pareja desempacó sus pertenencias y el marido empezó a trabajar a la semana siguiente. Todos los días al llegar a su casa, su esposa lo recibía en la puerta con una nueva queja.
- "Aquí hace mucho calor".
- "Los vecinos no son amigables".
- "La casa es muy chica".
- "Los niños me están volviendo loca".
Y cada tarde, su esposo la abrazaba mientras escuchaba sus comentarios negativos. Lo siento, le decía, "¿qué puedo hacer para ayudarte?"
Su esposa se calmaba y se secaba las lágrimas, pero empezaba con lo mismo al día siguiente.
Una tarde, su marido llegó a su casa con una hermosa planta con flores. Encontró un sitio apropiado en el jardín y la plantó. "Querida, le dijo, cada vez que te sientas triste, sal al jardín. Imagina que eres esa plantita, y mira cómo crece en tu jardín".
Cada semana traía a casa un árbol nuevo, o rosales, o plantas y las plantaba en el jardín. Su esposa cortó algunas flores y se las llevó a una vecina. Cada mañana regaba el jardín y observaba el crecimiento de las plantas.
También creció la amistad con otras mujeres de la cuadra y le pidieron consejo con sus jardines. Muy pronto, también le estaban pidiendo consejo espiritual.
Al finalizar el año siguiente, el jardín de esta pareja se parecía a los jardines que aparecen en la revista Buen Hogar.
Nuestro Padre Celestial sabe que todos tenemos que aprender a florecer en el lugar en el cual hemos sido trasplantados. Con su sabio toque de amor, no sólo vamos a florecer sino que vamos a producir continuamente el fruto del amor, la ternura y la felicidad.

domingo, 14 de junio de 2009

La Clave del Éxito

En mayo de 1969, la unidad de infantería de Jan Scruggs fue atacada por el Vietcong, Scruggs recibió heridas de metralla y fue enviado a su casa para recuperarse. Se sintió afortunado.
Después de su servicio en el ejército, Scruggs se graduó de consejero. Comenzó a soñar con erigir un monumento a sus compañeros, pero abandonó el pensamiento. Volvió a tener la idea en 1979, después de ver El Francotirador, una hermosa película acerca del impacto de Vietnam en un grupo de amigos de una pequeña ciudad. ¡Esta vez esta decidido! Aunque no tenía dinero ni una organización que lo apoyara, Scruggs usó sus propios fondos para establecer el "Fondo del Monumento a los Veteranos de Vietnam", una organización sin fines de lucro, organizó una conferencia de prensa donde dio a conocer sus planes. Reunió a un impresionante equipo de patrocinadores y en julio de 1980, Scruggs y sus voluntarios fueron premiados con un lugar cercano al monumento a Lincoln. Se les dio cinco años para que consiguiensen los fondos para la construcción.
En una operación relámpago, Scruggs y sus voluntarios consiguieron el dinero necesario para el Monumento a los veteranos de Vietnam... tres años antes de lo programado.
La clave del éxito no está en el tamaño de su meta... ¡sino en un impulso en alcanzarla!
Ningún proyecto vale el papel en el cual está impreso, salvo que lo impulse a usted a hacer algo.
Santiago 1:22
Sed hacedores de la palabra y no solamente oidores que se engañan a sí mismos.

miércoles, 10 de junio de 2009

Pasa el Ladrillo

¿Has observado alguna vez a obreros de la construcción trabajando en un edificio a distintos niveles de andamios, pasando los ladrillos del nivel inferior al andamio de arriba y de allí al siguiente? El trabajo avanza mientras cada ladrillo al llegar a un nivel es descargado y luego pasado al nivel siguiente.
¿Qué ocurriría si uno de los obreros del nivel intermedio no entregara sus ladrillos y al mismo tiempo le fuera alcanzada otra fila? ¿Qué si el hombre del nivel superior se negara a recibir su carga de ladrillos? El pobre hombre del nivel medio sería aplastado por la carga de ladrillos.
Eso es precisamente lo que nos ocurre en la esfera invisible. Cuando el primer problema nos alcanza fracasamos en no mandarlo "hacia arriba", y pronto nos sentimos presionados y oprimidos. Luego viene un segundo problema y un tercer problema y paulatinamente nos debilitamos hasta que finalmente quedamos aplastados bajo la carga.
El remedio es tan sencillo. Tan pronto como una ansiedad nos amenace debemos pasarla de inmediato "hacia arriba".
Watchman Nee

1 Pedro 5:7
Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
Mateo 11:28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, que yo los aliviaré.

viernes, 5 de junio de 2009

El Gusanito

Un pequeño gusanito caminaba un día en dirección al sol. Muy cerca del camino se encontraba un Chapulín:
- Hacia donde te diriges?, le preguntó.
Sin dejar de caminar, la oruga contestó:
- Tuve un sueño anoche; soñé que desde la punta de la gran montaña miraba todo el valle. Me gustó lo que vi en mi sueño y he decidido realizarlo.
Sorprendido, el chapulín dijo, mientras su amigo se alejaba:-Debes estar loco! ¿Cómo podrías llegar hasta aquel lugar? !Tú, una simple oruga!.
Una piedra será para ti una montaña, un pequeño charco un mar y cualquier tronco una barrera infranqueable.
Pero, ... el gusanito ya estaba lejos y no lo escuchó . Sus diminutos pies no dejaron de moverse.
De pronto se oyó la voz de un Escarabajo:
-¿Hacia dónde te diriges con tanto empeño?
Sudando ya el gusanito, le dijo jadeante:
- Tuve un sueno y deseo realizarlo, subiré a esa montaña y desde ahí contemplaré todo nuestro mundo.
El escarabajo no pudo soportar la risa, soltó la carcajada y luego dijo:
- Ni yo, con patas tan grandes, intentaría una empresa tan ambiciosa.
Y se quedó en el suelo tumbado de la risa mientras la oruga continuó su camino, habiendo avanzado ya unos cuantos centímetros.
Del mismo modo, la araña, el topo, la rana y la flor aconsejaron a nuestro amigo a desistir de su sueño!
-No lo lograrás jamás! - le dijeron-, pero en su interior había un impulso que lo obligaba a seguir.
Ya agotado, sin fuerzas y a punto de morir, decidió parar a descansar y construir con su último esfuerzo un lugar donde pernoctar:
- Estaré mejor, fue lo último que dijo, y murió.
Todos los animales del valle por días fueron a mirar sus restos. Ahí estaba el animal más loco del pueblo. Había construido como su tumba un monumento a la insensatez. Ahí estaba un duro refugio, digno de uno que murió "por querer realizar un sueño irrealizable".
Una mañana en la que el sol brillaba de una manera especial, todos los animales se congregaron en torno a aquello que se había convertido en una ADVERTENCIA PARA LOS ATREVIDOS. De pronto quedaron atónitos.
Aquella concha dura comenzó a quebrarse y con asombro vieron unos ojos y una antena que no podía ser la de la oruga que creían muerta.
Poco a poco, como para darles tiempo de reponerse del impacto, fueron saliendo las hermosas alas arco iris de aquel impresionante ser que tenían frente a ellos: UNA MARIPOSA.
No hubo nada que decir, todos sabían lo que haría: se iría volando hasta la gran montaña y realizaría un sueño; el sueño por el que había vivido, por el que había muerto y por el que había vuelto a vivir.
"Todos se habían equivocado".
Dios no nos hubiera dado la posibilidad de soñar, si no nos hubiera dado la oportunidad de hacer realidad nuestros sueños.


Josué 1: 9

Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque El Señor tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.

jueves, 4 de junio de 2009

La cera y el papel

Un maestro en la metáfora cuenta que un día la cera se quejaba:
-¡Esto es increíble! -dijo la cera mientras la llama la hacía caer derretida sobre el papel que había dejado.

-No te preocupes - le dijo el papel-, estoy seguro que todo te va a salir bien.-¡Jamás había sufrido tanto como ahora! - exclamó la cera mientras seguía goteando.

-Esto no ocurre por casualidad, hay un buen designio tras todo, y ya verás que va a tener un buen fin -replicó el papel.La cera no pudo responder de inmediato, pero cuando miró hacia arriba tenía una hermosa impresión en el rostro: el sello que se le había aplicado.

-¡Ah, ahora entiendo! -dijo la cera-. Me derritieron para que pudiera recibir esta hermosa y duradera impresión.

Sus sufrimientos ya habían terminado.No es bueno gemir ni quejarse, es tan fácil regocijarse.Cuando Dios la lluvia envía pienso, ¡esta lluvia es mía!Dios usa la aflicción en la misma forma que usa la lluvia para el pasto verde.Debemos ir a la gloria por el camino de la doliente cruz. En ninguna parte se nos ha prometido que volaríamos al cielo en un colchón de plumas, por lo que no debemos desalentarnos cuando el camino se nos presenta áspero, tal como lo transitaron nuestros padres antes que nosotros. -C.H. Spurgeon.

Antes pensaba que los dones de Dios estaban en estanterías puestas sobre la otra, y que mientras más creciéramos en el carácter cristiano, más fácil nos resultaría alcanzarlos. Pero he descubierto que los dones de Dios están en repisas colocadas una debajo de la otra, y que no es cuestión de crecer para alcanzarlas, sino de ir cada vez más abajo. Tenemos que descender siempre para obtener sus preciosos dones. -F.B. Meyer.


Salmo 119:67
Antes que fuera humillado, descarriado andaba; mas ahora guardo tu palabra.

Fuente: Manantiales en el desierto 2, Editorial Unilit